Por: CÉSAR RUIZ
La inseguridad alimentaria tiene unas causas bien definidas y por muchas personas conocidas. En nuestro país a pesar de contar con una gran variedad de recursos naturales, excepcional mezcla de pisos térmicos, fuentes hídricas que envidiaría cualquier lugar del planeta podemos llegar a este estado.
Iniciemos por pensar en los factores culturales y veremos que las practicas de nutrición de los colombianos no son adecuadas, las comidas rápidas características de la sociedad moderna se están convirtiendo en la base nutricional de los habitantes que tienen acceso económico, muchos colombianos bajo la línea de la pobreza apenas ven comida decente en las vallas publicitarias, a eso se le suma el alto precio de los alimentos por varios factores como el alto precio de los combustibles y en general de cada uno de los factores que intervienen en el transporte. La atomización de las familias nucleares que inciden directamente en las costumbres alimenticias de las personas.
Efectos climáticos adversos, los factores son visibles, la escasez de agua se hace cada vez mas evidente y la contaminación de fuentes hídricas se exacerba, cada vez los ecosistemas se han transformado y como consecuencia las fuentes se han secado y las especies animales disminuyen. Este aparte tiene que ver de forma contundente con la degradación del medio, tala indiscriminada de bosques y la erosión en las riveras de los ríos que conduce a la baja productividad agraria, gran problema fermentado por el monocultivo de exportación en zonas especificas causando un gran impacto medioambiental.
Todo lo anteriormente relacionado se fortifica gracias a la poca capacidad de gestiones ambientales y políticas propias de los gobiernos colombianos, los cerros nororientales de la ciudad de Bogotá, las reservas forestales de los distintos departamentos, concesión para la explotación de recursos en las regiones, muy poca planificación urbana y poca educación sobre los temas concernientes. En Colombia existe muy poco acceso a la propiedad de la tierra, esta destinada a clases y grupos especiales, los campesinos no ocupan un lugar preponderante en la sociedad y por el contrario se continúa con la tradición estéril y anquilosada de que su trabajo es deshonroso como su condición. El conflicto interno que si existe hace décadas y que ha sido subvalorado por los gobernantes como causa de la desaparición del campesinado y como amenaza para la seguridad alimentaria de nuestro país. Los ingresos de quienes trabajan la tierra son escasos.
La población de nuestro país crece de manera alarmante, así el remedo de censo aplicado hace tres años (2006) diga que no es tan acelerado. La gente inunda las ciudades como si una represa que la contuviera se hubiese roto, las plazas de empleo de las grandes ciudades no son suficientes, el ingreso per cápita es precario y el PIB disminuye, no hay autoridades económicas realmente estudiosas del temas sino mas bien voceros de los grupos económicos elucubrando las formas de trabajar solo para su conveniencia.
Todo desembocando en un alto consumo de recursos naturales, de todo tipo, contaminando el aire y el agua, deforestando y utilizando técnicas agropecuarias inadecuadas mientras la mirada complaciente del ejecutivo, el legislativo y judicial hacen caso omiso. OJALÁ CHUCEN ESTE LLAMADO A LA CONCIENCIA PARA QUE SEPAN QUE PASA.
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