Hay una canción de los Jaguares que ora: " hace tiempo me dijeron que aquí no pasa nada, que todo está guardado para que no le pase nada, que esta tierra es de ciegos y el tuerto está en el cielo.... somos sumisos y obedientes, con ganas de gritar, con ganas de matar, pero hace tiempo que aquí nos educan para mentir", para muchas cosas más nos educan y lastimosamente a veces educamos, para continuar con la impotencia adquirida, para celebrar brindando con cócteles de mentiras.
Este artículo pretende manifestar mi inconformismo con la cátedra de historia en los colegios bogotanos y colombianos en general, hijos de los libros de texto donde se utiliza esta materia para perpetuar la celebración de eventos que se magnifican o minimizan de acuerdo a las necesidades de quien orienta el Estado bajo la pretensión de que “develar la verdad conduciría seguramente a la perdida de identidad ya que la celebración de fechas se convierte en un ritual de cohesión social”,y está bien la celebración pero vale la pena mirar la real dimensión de los eventos que se celebran, por ejemplo, el grito de independencia del 20 de Julio en Colombia. Yo me pregunto ¿independencia?, iniciemos por decir que lo que se dio con este grito fue una rebelión más no una revolución que como su nombre lo dice traería una transformación total en las dinámicas políticas y económicas del momento, recordemos que los criollos traicionaron al pueblo al venderse con el único objetivo de asumir los puestos que ostentaban los hijos de España.
Vale la pena recordar que la batalla más grande en ese proceso fue la del pantano de Vargas y que la del puente de Boyacá fue solo el colofón de esa gesta. Que dada la denominada independencia se inicio una guerra donde arribaron las mezquindades que desmembraron el territorio para crear Venezuela, Ecuador, Perú, Bolivia y Colombia después de los encuentros entre centralistas y federalistas. Que nuestro país durante el todo el siglo XIX no tuvo periodos de estabilidad política, de allí la proliferación de constituciones y enmiendas. Que además, desde entonces el pueblo ha permitido todo bajo el sofisma de la existencia de una veleidosa soberanía.
De allí que se permitiese la venta del canal de Panamá, también que se cedieran territorios a otros países, que se entrara en guerra con el Perú entre los años 20 y 30 bajo la manipulación de los caucheros como los que magistralmente se muestran el la vorágine de Rivera, pueblo que ha permitido la entrega de los recursos como el petróleo, el manoseo permanente de potencias extranjeras en las decisiones políticas internas, gobiernos sanguinarios como el de Laureano Gómez, mezquinos como el de Turbay, imbéciles como el de Pastrana, cínicos como el de Samper y manipuladores como el de Álvaro Uribe (sin nombrar esperpentos como el de Belisario el poeta, el de Virgilio Barco cuya lamentable administración no merece ni un epíteto, o el de Gaviria que hipotecó el país con la apertura económica sin planificación). NO SE PUEDE HABLAR DE INDEPENDENCIA EN UN PAIS MENTALMENTE ENCADENADO.
Encadenado a Caracol, RCN, El tiempo, a las cifras absurdamente mentirosas del dane, al mesianismo, también al facilismo, a recuerdos de lideres asesinados que se evocan con nostalgia pero de los cuales no se retoma realmente el pensamiento para rendirles una verdadero homenaje transformando la realidad de hostilidad e inconciencia absurda y constante, recuerdos que disimulan un nerviosismo al borde del estallido... Encadenado a las diatribas de los políticos de turno que solo fantasean lujuriosas historias, encadenado a una industria cultural foránea, a las piernas de Andrea Serna y sus realities. Encadenado a las mentiras de esos presidentes que dan risa y serían mejor presidentes de Disneylandia, también al miedo a los guerrilleros y paramilitares, peor aun: el miedo al que dirán….al proceso
Usted que esta leyendo si tiene un tiempito cuéntenos ¿a que más estaremos encadenados?
1 comentario:
No Cesar no pudo describir mejor lo que está pasando en el país. pero como liberar de las cadenas las mentes de cada uno de nosotros, o bueno de las personas del comun que aceptan lo que sucede, o difieren pero a la final lo que ellos consideran no tiene eco.
No se, pero me cuestiona cual es mi papel y como puedo ser actor en este cuento
yo creo cada vez mas que tengo que lanzarme a la politica
para permitirme conocer el sistema y saber finalmente como funcionan las cosas arriba.
Cesar cambiale el color en negro se veia mejor porque el blanco irrita los ojos
un abrazo.
Lo admiro.
Biviana Aroca
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